Con doblete de Rodrygo, Real Madrid superó por 0-2 al Chelsea FC y, con el 4-0 global, regresará a las semifinales de la Champions League.
Un primer tiempo con el guión esperado
Por onceava vez en 13 ediciones, el Santiago Bernabéu tendrá un duelo de clasificación para la definición del torneo de clubes más importante del mundo. El Madrid llegaba con el 2-0 conseguido en dicho estadio, pero para Carlo Ancelotti no era momento de hacer especulaciones.
El italiano repitió el mismo once de la ida, mientras Frank Lampard realizó cuatro cambios tras el primer enfrentamiento. Dos de ellos obligados: Marc Cucurella y Trevoh Chalobah comenzaron por el expulsado Ben Chilwell y el lesionado Kalidou Koulibaly. Por su parte, Kai Havertz y Conor Gallagher sustituyeron a Joao Félix y Raheem Sterling en la delantera.
Entendiendo el papel a representar en este partido, Chelsea salió con la impronta de buscar la victoria a como de lugar, mientras que el Real espero pacientemente para dar la estocada final a la serie. Los londinenses contaron con un par de ocasiones de Gallagher y N’golo Kanté en los primeros diez minutos, aunque sin encontrar portería.
Los merengues, que aguantaban el asedio rival, contarían con una de las dos oportunidades más claras del primer tiempo: Dani Carvajal envió un centro raso para Rodrygo, que logró rematar ante la marca férrea de Chalobah y solo el poste le evitó que estuviera gritando el primer gol del partido.
Vinicius Junior y Luka Modric comenzaron a conectarse y apareció lo mejor del Madrid en el primer tiempo. Tanto el brasileño como el croata tuvieron sus chances, pero la más clara de todas fue para los blues: Reece James mandó un centro por bajo, que se metió entre toda la defensa madridista y fue Thibaut Courtois, como siempre, quien terminó manteniendo el cero en su arco.
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Real Madrid capitaliza sus opciones en la segunda mitad
Ancelotti tuvo que retocar su defensa en el descanso con la entrada de Antonio Rüdiger por los problemas físicos de David Alaba. El segundo tiempo comenzó como el primero, con un Chelsea agresivo y un Real Madrid que mantenía su defensa como una muralla. Aunque el equipo se veía acorralado, comenzaron a aparecer los espacios que le gustan al campeón de Europa.
Cucurella saltó a la presión y le dejó sitio en su espalda a un Rodrygo que superó también a un Chabolah que tacleó muy a destiempo. Su pase le cayó a Vinicius que tuvo la sangre fría para devolvérsela y que sea el quién defina la serie con el 0-1.
Con un pie y medio fuera de las semifinales, Chelsea se lanzó decididamente a intentar recuperar sus opciones lo antes posible, pero demostraron sus problemas ofensivos de esta campaña. La más clara posibilidad estuvo en los pies Enzo Fernández, salvada nuevamente por un imperial Courtois.
Pese a poner más pólvora en el ataque con la entrada de Joao Felix, Sterling y Mykhailo Mudryk, los ingleses no tuvieron orden ni definición en toda la noche. Vinicius pudo sentenciar, pero cederle su mejor oportunidad a Rodrygo, que firmó el doblete para ajusticiar al equipo inglés tras un regalo de un Fede Valverde brillante en la segunda mitad.
A partir de ahí, todo fue más sencillo para los de Ancelotti, que están a dos partidos de una nueva final por tercera campaña consecutiva y por trigesimosegunda ocasión en su historia. La peor noticia, aparte de la lesión de Alaba, la amarilla a Eder Militao que le hará perderse la ida de semifinales ante Manchester City o Bayern Munich.